Blog de crítica de la cultura y otras balas de fogueo al gusto de Óscar S.

Encuadre: página de "Batman: Year One", Frank Miller y David Mazzucchelli, 1986-7, números 404 a 407 de la serie.

jueves, 15 de diciembre de 2011

Cuarintiuno

No entiendo porque cuando se cumplen años se tiene costumbre de soplar la velita del que empieza. Se supone que el acto consiste en la hombría -valida para todo sexo- de apagar el que se acaba, dándolo resueltamente por pasado. Eso hare, para variar. Busco "acmé" en google y sólo aparece la mirífica empresa que surte al Coyote y poco más. Pues nada, a estudiar, chicos, como y por qué los viejos y sabios griegos antiguos pensaban que el esplendor, vigor, potencia, exuberancia, lucidez, sagacidad, penetración, vitalidad, etc., individuales y personales son muy posteriores a los veinticinco, a ver si os lo creéis...

(Ya digo: antes de los cuarenta no hay vida inteligente, pero después ya es tarde; salvo para este, claro, que es es inmortal porque nunca ha estado vivo)